La seguridad de nuestros gatos es muy importante, tanto que si no tenemos ventanas, terrazas, balcones y patios protegidos, pueden escaparse, perderse, caer y sufrir lesiones de por vida, o hasta morir.
¿Por qué creemos que es tan importante concienciar sobre la seguridad? Nuestro caso.
Hasta ahora nosotros no habíamos contado en público que nuestro Buda Bosques del Zar *ES había caído por la terraza de un tercer piso, y ha llegado el momento de contarlo, algunos lo sabéis ya por que os lo hemos contado de palabra. A todos nos puede pasar, es verdad. Bien es cierto que entonces Buda vivía en casa de Raúl, con sus padres, y no estaban ventanas ni terraza protegidas y no dependía directamente de nosotros, pero eso no quita para que nos sintamos muy mal por ello.
Justamente por que lo hemos sufrido en carnes propias sabemos cómo nos sentimos, y somos muy críticos a la hora de afrontar este tema. Para nosotros es una negligencia. No son accidentes, no, son neglicencias, ya que somos los resonsables directos de nuestros gatos, y ellos no son conscientes del peligro.
Buda sufrió rotura de los huesos de la pelvis, laceración de uretra y desplazamiento de vértebral de la cola. Pasó, a finales de agosto de 2015, hace ahora unos dos años. El diagnóstico se complicaba, por que no conseguían sondarlo, y si no se le sondaba, podría morir, o se hacía necesaria una operación complicada, cuya cicatrización nadie nos aseguraba que fuera a ser buena.
Radiografía hecha desde la parte superior, con los huesos rotos y desplazados.
Radiografía lateral, con los huesos rotos y desplazados.
Radiografía lateral con el sondaje que se pudo colocar al fin.
No os podeis imaginar lo que pasamos, tanto nosotros como él, que tuvo que estar hospitalizado, sufrió muchos dolores y molestias, y aunque hoy esté con nosotros y esté bien, completamente recuperado y la lesión de la uretra se haya curado perfectamente, no queremos que ningún gato nuestro vuelva pasar por algo así. Actualmente Buda tiene una mala soldadura de los huesos, lo que le imposibilita ir a exposiciones y competir, cosa que para nosotros es lo de menos. Acudimos al mejor traumatólogo de España, en la Clínica Veterinaria Puerta de Hierro, que nos dijo los mismo que nuestro veterinario Raúl Torrego del Hospital Clínico San Martín de la Vega, la operación para recolocación de los huesos no aseguraba una buena soldadura, sólo podíamos confiar en la musculatura de Buda, que todo quedase más o menos en su sitio, y no le doliese de por vida.
Momentos en los que estaba en la clínica y no sabíamos si iba a salir adelante
Imagen de la sonda y el moratón que le produjo el golpetazo (estaba sedado aún cuando hicimos la foto)
Se nos partía el corazón los 15 días que estuvo ingresado, y todos los días nos desplazamos a verle para que nunca se sintiera solo ni abandonado. ESta imagen lo dice todo, agradecía cada una de las visitas con un amor y una ternura indescriptibles.
Cuando por fin regresó a casa, caminando.
Las vértebras se recolocaron, la uretra cicatrizó bien y nuestro Buda puede andar, incluso ha sido papá. No sufre dolores actualmente y es un gato feliz, pero podría haber quedado lesionado, con dolores, o incluso podría ser que nuestro niño no estuviera hoy con nosotros.
¿Por qué nos recreamos en esta desgracia? Por que es nuestro deber concienciar a todos y cada uno de los dueños de gatos de que ellos pueden caer de balcones y ventanas, que pueden escaparse y pueden sufrir desgracias por nuestra negligencia.
Por ello, hemos creado un tutorial de cómo podemos proteger nuestras ventanas y evitar que puedan caer o escaparse. Ver Tutorial.
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